La terapeuta familiar Jane Nelsen, coautora de la serie Positive Discipline (Disciplina Positiva) señaló que “La autoestima proviene de sentir que uno es aceptado, que es capaz, y de saber que nuestras contribuciones son valiosas y valen la pena”.

 

Además dijo que es importante que los padres sepan que la autoestima es un sentimiento fugaz, pues a veces nos sentimos bien con nosotros mismos y a veces no. La especialista recomienda a los padres asegurarse que su hijo sienta orgullo y respeto por sí mismos, además de incentivar los siguientes consejos:

 

1) Dale amor incondicional.  Tu hijo se sentirá mejor si lo aceptas tal y como es, sin importar cuáles son sus puntos fuertes, sus dificultades, su temperamento o su destreza. Cuando tengas que disciplinarlo, aclárale que es su comportamiento y no él lo que es inaceptable.


2) Bríndale atención. Aparta tiempo para dedicarle a tu hijo tu atención completa, eso le ayudará a reforzar la sensación de que es valioso e importante para ti.

Si un día tienes poco tiempo, díselo, pero ten en cuenta sus necesidades.

3) Establece límites. Establece algunas reglas razonables. Es importante que sepa que algunas reglas no se pueden cambiar, y es posible que tengas que repetir muchísimas veces las reglas que estableciste, antes de que las siga


4) Fomenta riesgos saludables. Anima a tu hijo a que explore algo nuevo, como probar comida diferente. Aunque siempre existe la posibilidad del fracaso, sin riesgos no hay oportunidades para el éxito. 

5) Déjalo que cometa errores. Los errores también son lecciones valiosas para que tenga confianza en sí mismo. De esa forma su autoestima no sufrirá y comprenderá que es normal cometer errores de vez en cuando.

6) Celebra lo positivo.  Haz un esfuerzo por reconocer, todos los días, las cosas buenas que hace tu hijo y dilo en voz alta. Tu pequeño tendrá la sensación de haber logrado algo y su
autoestima se fortalecerá; demás sabrá exactamente qué fue lo que hizo bien. 

7) Escucha con atención. Si tu hijo te quiere decir algo, detente y escúchalo. Necesita saber que sus ideas, deseos y opinión importan. Ayúdalo a sentirse cómodo con sus emociones. Si compartes tus propios sentimientos, él expresará los suyos con más confianza. 

8) No compares.  Es probable que sienta vergüenza, envidia y presión por competir. Incluso comparaciones positivas como “Tú eres el mejor jugador”, son potencialmente dañinas porque a tu hijo se le hará difícil alcanzar tu nivel de exigencia.


9) Ofrécele empatía.  Esto le puede ayudar a aprender que todos tenemos puntos fuertes y débiles, y que no tiene que ser perfecto para sentirse bien consigo mismo. 

10) Ofrécele aliento.  Es importante repetirle que creen en él y que lo animen a seguir adelante. Dar aliento significa reconocer el progreso, y no sólo premiar un logro.

 

Aunque existen excepciones, muchas veces se ve afectada su autoestima de los niños por ser bajitos, por lo que son niños tímidos, introvertidos e incluso algunos son agresivos, su rendimiento escolar no es el óptimo, y esto los convierte en niños tristes y con poca disposición en el área social.